El Ministerio ha iniciado el trámite de modificación del Código Técnico de la Edificación (CTE), actualmente en fase de audiencia pública. Aunque todavía no se trata del texto definitivo, el borrador permite identificar con claridad la línea de trabajo que seguirá la nueva normativa y su impacto en el diseño, ejecución y mantenimiento de las instalaciones de protección contra incendios (PCI).
En Adumet hemos revisado el documento completo y, a continuación, desarrollamos los aspectos que consideramos más relevantes para el sector y para la seguridad de los edificios.
🔥 Mayor control de la propagación exterior del fuego
El borrador del nuevo CTE refuerza los requisitos contra incendios relacionados con la propagación del fuego por el exterior del edificio. La experiencia de los últimos años—sumada a los incidentes internacionales en fachadas ventiladas y sistemas SATE—ha impulsado a las administraciones a revisar de manera más estricta los criterios de reacción y resistencia al fuego en la envolvente.
Esto no se limita a la clasificación de los materiales. La actualización afecta a:
- Encuentros entre forjados y fachada.
- Cierres perimetrales y aristas verticales.
- Cámaras ventiladas y rupturas de continuidad.
- Sellado de huecos y pasos de instalaciones.
El objetivo es minimizar el riesgo de que un incendio iniciado en una vivienda o local se propague velozmente por la fachada y comprometa al resto del edificio, algo que puede suceder en segundos si el diseño y la ejecución no garantizan la debida compartimentación exterior.
🚗⚡ Más exigencias en aparcamientos con presencia de vehículos eléctricos
La movilidad eléctrica se ha incorporado a los edificios a gran velocidad, pero el marco normativo no había evolucionado al mismo ritmo. El nuevo borrador del CTE introduce ajustes importantes para mejorar la seguridad contra incendios en aparcamientos donde haya vehículos con baterías de litio y puntos de recarga.
Entre los aspectos que se revisan destacan:
- Requisitos de ventilación adaptados al riesgo térmico asociado a las baterías.
- Mejoras en los sistemas de detección temprana, esenciales para identificar un conato antes de que el incendio entre en fase de descontrol.
- Revisión del control de humos, tanto en extracción como en sobrepresión, para garantizar la evacuación y el acceso de los equipos de emergencia.
- Ajustes en sectorización y en condiciones de accesibilidad para bomberos.
Este avance era necesario: las características del fuego en baterías no son equivalentes al de combustibles tradicionales, y requieren un enfoque más técnico y preventivo.
🛎️ Revisión de los criterios de detección en edificios residenciales
El borrador introduce cambios relevantes en uno de los aspectos más sensibles: la protección contra incendios de las personas en viviendas y zonas comunes de edificios residenciales. En determinados supuestos, se amplía la obligatoriedad de instalar sistemas de detección automática y alarma.
Esto supone:
- Una mejora en la capacidad de aviso temprano, especialmente en horarios nocturnos.
- Mayor seguridad para personas vulnerables o en entornos con alta ocupación.
- Reducción del tiempo de respuesta ante un incendio, lo que se traduce en menor propagación y menores daños.
Este punto representa un avance hacia el estándar internacional, donde la detección en residenciales está mucho más extendida que en España.
📘 Actualización de referencias UNE en el DB-SI
El nuevo borrador también actualiza las referencias a normas UNE relacionadas con los sistemas de protección contra incendios. Esto implica que varias de las normas técnicas que se utilizaban en proyectos, instalaciones e inspecciones se reemplazan por versiones más recientes.
Las áreas afectadas incluyen:
- Sistemas automáticos de rociadores.
- Sistemas de detección y alarma (series UNE-EN 54).
- Señalización fotoluminiscente de evacuación.
- Sistemas de control y extracción de humos.
Actualizar las referencias es clave para mantener el CTE alineado con las tecnologías actuales, garantizar compatibilidad entre equipos y mejorar el rendimiento de los sistemas PCI en condiciones reales de emergencia.
En conjunto, esta actualización supone un paso adelante hacia edificios más seguros y técnicamente mejor definidos frente a la seguridad contra incendios. La normativa evoluciona para adaptarse a nuevos materiales, nuevas formas de movilidad y nuevos modelos de uso de los edificios.
Para empresas instaladoras y de mantenimiento contra incendios como Adumet, estos cambios implican una adaptación progresiva en todas las fases: proyecto, instalación, mantenimiento y legalización.
🔧🏢 Nuestro objetivo debe ser claro: que cada edificio esté preparado para los nuevos requisitos para conseguir entornos seguros frente a incendios.
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